Durante todo este tiempo en el cual nos hemos hecho compañía —algo que agradezco y que es mi gran motivación—, estoy segura de que tus definiciones de bienestar y salud han ido evolucionando.
Cada día tengo más claro que estar sano no es lo mismo que no estar enfermo. Para mí, se trata de vivir en un estado de bienestar, sintiéndome llena de energía y en plenitud. Con esto no quiero decir que siempre tengas que estar bien, pero sí que la balanza debería inclinarse mayormente hacia ese lado y que, cuando te desvías un poco, es vital saber muy bien cómo “regresar” a tu centro.
Así es como este tema ha ido evolucionando para mí. Entre más aprendo y comparto información, más entiendo la importancia de numerosos factores y lo mucho que estos influyen de manera directa e indirecta en mi bienestar. Sin duda se trata de un área que va cambiando, así como nosotros y nuestros cuerpos van modificándose, también.