Identificando los hábitos negativos en la rutina diaria
Hace unas semanas platicaba con un grupo de trabajo sobre el tema de los hábitos y la relación que estos tienen en nuestra búsqueda de mejora. Coincidimos en que muchas veces nos enfocamos en agregar nuevos hábitos a nuestra rutina, pero—y fue ahí donde comenzamos a hacer un análisis más profundo— también coincidimos en que quizás la clave para lograr el bienestar no está en la suma, sino en la resta.
¿A qué me refiero con esto? Pues a que casi siempre estamos pensando en agregar cosas a la lista y no dedicamos el mismo tiempo a revisar de forma consciente los hábitos que ya tenemos y que mermarán, o bien, serán un obstáculo en la integración de un nuevo hábito —independientemente de lo adecuado que sea o de la importancia que tenga.
Hoy te comparto la lista de cinco hábitos que considero que impactan de forma negativa en el logro de nuestros objetivos, los cuales, una vez eliminados, pueden desbloquear un camino más claro hacia el bienestar, la productividad y el crecimiento personal.
1. El hábito del autosabotaje
El autosabotaje es cuando consciente o inconscientemente obstaculizas tu propio éxito. Este hábito puede tomar muchas formas, como procrastinación, diálogo interno negativo o no establecer límites. Pregúntate, ¿tienes miedo al éxito? ¿Dudas de tus habilidades?
2. Los falsos apegos
Los falsos apegos son conexiones emocionales poco saludables con personas, objetos o hábitos que ya no te sirven. Estos pueden agotar tu energía y dificultar el crecimiento personal. Ejemplos comunes incluyen permanecer en relaciones tóxicas o aferrarse a posesiones materiales.
3. La negatividad
La negatividad puede manifestarse de diversas formas, como el pesimismo, el cinismo o la queja constante. A menudo se convierte en un hábito sin que nos demos cuenta. Fíjate si a menudo te enfocas en lo que está mal en lugar de lo que está bien, o si te cuesta encontrar alegría en los momentos cotidianos.
4. La procrastinación
Procrastinar es el acto de retrasar tareas, lo que a menudo provoca estrés y disminución de la productividad. Puede ser impulsado por el miedo al fracaso, el perfeccionismo y puede hacerte sentir abrumado. Pregúntate, ¿evitas las tareas porque parecen demasiado difíciles? ¿Tienes miedo a no cumplir con ciertas expectativas?
5. La indulgencia excesiva
Los excesos pueden tomar muchas formas, como comer o beber de más o pasar demasiado tiempo en las redes sociales. Estos hábitos pueden proporcionar placer temporal, pero también pueden tener consecuencias negativas a largo plazo. Reconocer el exceso de indulgencia implica ser honesto contigo mismo sobre tus acciones y su impacto en tu vida.
Me gustaría que examinaras en ti los puntos antes mencionados para finalmente encontrar el equilibrio. Esto implica establecer límites, practicar la moderación, reconocer los factores detonantes que te conducen a caer en abusos y buscar formas más sanas de lidiar con estos.
La próxima semana ahondaremos más en este tema, analizando cada uno de los hábitos negativos a más profundidad y viendo cómo podemos abordarlos, pero por ahora quiero invitarte a que vayas identificando si tienes alguno de ellos.
Quiero reiterar que a veces el reconocerlos no significa que tenemos todos los elementos para hacer algo al respecto, pero sí es un gran paso para pensar en cómo podemos tomar acción.
