El contenido de la tabla nutricional

Después de haber aprendido acerca de la relevancia que tiene el leer muy bien el contenido de la tabla nutricional en el artículo de la semana pasada, me gustaría que ahora mismo busques un alimento empacado que tengas en casa y que prestes atención a la tabla que le acompaña.

Dicha tabla está compuesta por diferentes partes, las cuales a veces pueden resultar difíciles de interpretar. Por eso, aquí te guiaré para analizarlas juntos. ¿Estás listo con tu producto en mano? ¡Empecemos!

¿Por qué es tan relevante analizar la tabla nutricional?

Como ya bien sabes, una de las prácticas más poderosas a la hora de tomar el control de nuestra alimentación es leer y entender de forma integral la información descrita en las etiquetas de los productos que consumimos.

Siendo honesta, la tabla nutricional no siempre es fácil de entender. Lamentablemente, muchas empresas alimenticias hacen que las etiquetas sean un tanto confusas para que nosotros, los consumidores, pensemos que lo que estamos adquiriendo es lo adecuado.

La información que debemos encontrar en la mayoría de los alimentos empacados en nuestro país, tanto en la tabla de valores nutricionales como en el listado completo de los ingredientes, está regulado por la norma oficial mexicana NOM-051-SCFI/SSA1-2010 (“especificaciones generales de etiquetado para alimentos y bebidas no alcohólicas preenvasados - información comercial y sanitaria”), con la que se insta a los fabricantes a que sus productos sean de buena calidad.

Toma el control de tu alimentación

Uno de los pilares para llevar un estilo de vida saludable es la alimentación, lo cual reitera que elegir aquello con lo que nutrimos nuestro cuerpo es de suma importancia. Hoy vamos a ver por qué.

Lo que consumimos tiene un impacto en todas nuestras acciones, desde la energía que tenemos y la manera en que funciona nuestro cerebro, hasta la forma en la que se regeneran nuestras células. Los alimentos influyen en la información que pasará a las células nuevas que producimos todos los días, y en cómo y con qué se podrán llevar a cabo los procesos de limpieza y desintoxicación de nuestros órganos.

De similar manera, lo que decidimos darle a nuestro cuerpo afecta nuestro estado de ánimo, la calidad de nuestros pensamientos, nuestra capacidad de enfocarnos, la movilidad, la fuerza y más.

Si tomamos en cuenta que muchas personas mantienen una alimentación deficiente de manera sostenida durante largos periodos de su vida, podemos concluir con certeza que esta gran negligencia terminará por convertirse en problemas de salud y deficiencias aún más complejas.

Volviendo a mi centro

No sé si a ti te pase esto, pero hay días en los que siento que necesito hacer un reajuste, analizando dónde estoy y cómo me siento, para volver a mi centro. El ritmo del día a día, la carga de trabajo y llevar una agenda saturada, mientras trato de balancear todas las cosas que son importantes para mi bienestar (como el ejercicio, el trabajo, los proyectos, la casa y la vida social), puede resultar agobiante.

Y es que a veces, por más que me organice, la vida sucede y mantener el orden es insostenible. Comienzo a sentirme “fuera de mi elemento” y regreso a rutinas o hábitos que ya tenía descartados (esas cosas que el caos, por inercia, puede detonar fácilmente en mí).

Cómo preparar una buena taza de té de jengibre fresco

Hoy quiero compartir contigo la forma en la que a mí me gusta hacer el té de jengibre fresco, una de las recetas más solicitadas por mis clientes y lectores.

El jengibre tiene tantos beneficios que recomiendo tenerlo siempre disponible en casa. Sus poderosas propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y antimicrobianas hacen de él un gran aliado en tu vida diaria.

Se ha utilizado tradicionalmente como remedio para la náusea, el vómito, el resfriado, la gripe y el dolor. También ha sido sujeto de estudios, ya que ayuda en el tratamiento de muchas afecciones, como la presión arterial alta, el colesterol alto, la diabetes, varios tipos diferentes de cáncer, enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer y el Parkinson, y otras más.

Mi consejo es que siempre optes por los ingredientes naturales, usando solo la raíz de jengibre y no los tés que venden en forma de bolsitas.

Cómo ser amoroso con uno mismo

En respuesta al artículo de la semana pasada, muchos de ustedes mostraron interés por saber cómo se ve el amor propio en la práctica, así que hoy ahondaremos un poco más en este tema que considero esencial.

Sin duda, la capacidad de hacerte responsable de manera amorosa y tener límites saludables contigo mismo es una de las mejores formas de practicar el amor propio de forma tangible. Cabe destacar también que el amor propio, un amor incondicional, te permite tratarte a ti mismo de forma amorosa, incluso cuando te decepcionas a ti mismo.

No te da necesariamente la libertad de hacer lo que sea, pero sí te ayuda a enfrentar miedos, buscar apoyo para trabajar en comportamientos de auto-sabotaje, esforzarte por tomar riesgos saludables, profundizar para sacar lo mejor de ti mismo, y ser honesto cuando te arrepientes de una acción o cuando tomas una mala decisión. Todo esto cae en la categoría de responsabilidad.

Con amor propio, todo lo anterior se puede lograr sin vergüenza ni juicio. La simple conciencia y un sentido de responsabilidad amorosa hacia ti mismo serán la clave. Tomando esto en cuenta, quiero compartir contigo estos consejos que pueden ayudarte a ponerlo en práctica más fácilmente: