Mi salud y mi trabajo

Dentro de nuestro ambiente de trabajo, hay situaciones que pueden ayudar o mermar nuestro bienestar. En especial en tiempos de pandemia, hemos identificado varios temas de salud relacionados con nuestro ambiente laboral.

Este tema es de las áreas que más disfruto dentro de lo que hago. Prácticamente trabajo en conjunto con una empresa determinada, desarrollando programas de bienestar enfocados en los empleados, logrando así un impacto no solo en su desempeño laboral, sino personal. Los cambios se reflejan en el estado de ánimo de las personas, en sus relaciones personales y en las acciones que toman al sentirse parte de una comunidad interesada en su salud.

Consideremos que el trabajo es donde pasamos la mayor parte de nuestro día. Nuestros compañeros se vuelven nuestra red de soporte y apoyo. La cultura de bienestar que tenga la empresa donde laboramos impactará en gran medida el logro de nuestros objetivos de bienestar. Recientemente, como resultado de algunas modificaciones a la ley federal del trabajo, este tema se ha ido introduciendo de forma más tangible. Las cabezas de las empresas se han dado cuenta del impacto tan grande que tiene la salud en sus empleados. El contar con un equipo de colaboradores con estado de salud mediocre, afecta no sólo en las inminentes ausencias, sino también en problemas como estado de ánimo, baja productividad, falta de motivación, ambientes tóxicos de trabajo, exceso de estrés, etc.

Existe una falsa creencia en relación con el “gasto” de programas de bienestar. Se considera que no es necesariamente una prioridad. La realidad es que los beneficios superan por mucho esa inversión. Hemos encontrado áreas de fácil implementación, donde las mejoras dentro del ambiente laboral son perceptibles de manera casi inmediata.

Algunas de las acciones que introducimos de manera inicial son pláticas informativas sobre cambio de hábitos, talleres con consejos prácticos, actividades mensuales enfocadas a un tema relacionado al bienestar, retos saludables entre compañeros de trabajo, implementación de algunas áreas que favorezcan y sostengan el estilo de vida más saludable, entre otras.

En fin, las opciones para crear una red de soporte durante las horas de trabajo son vastas. Lo importante es ver que las metas de salud no tienen por qué estar peleadas con el horario de trabajo.

Recuerda que tu día a día incluye esta actividad y, al buscar formas de que se alineen, jugará siempre a favor tuyo.

¡Hoy es un buen día para empezar!